Logro de una cultura de paz y no violencia en NLCP

Por Gerald Smith

Mi nombre es Gerald Smith y soy defensor estudiantil y supervisor del programa Guerreros de la Paz en la escuela preparatoria North Lawndale College Prep (NLCP). Soy de Virginia, pero de adulto me fui a vivir a Chicago. Me mudé a Illinois con un título en trabajo juvenil, listo para servir a la comunidad. Sin embargo, cuando llegué aquí, las escuelas públicas tradicionales no me contrataban si no tenía un certificado de Illinois. NLCP es una escuela charter que en 2009 corrió el riesgo y me contrató. Estoy muy feliz de que lo haya hecho.

Me encanta arreglar cosas que se han roto. En mi adolescencia era curioso y torpe: ¡siempre quería arreglar las cosas que rompía! También comencé a sentir que mi misión era comprender qué vivencias humanas estaban “rotas” y ayudar a repararlas. Ese primer año en NLCP afronté detenciones y suspensiones escolares. Pero luego la dirección se dio cuenta de que tenía habilidades para abordar y apoyar a los jóvenes que estaban pasando momentos difíciles. En mi rol, formé un programa denominado “Aprendiendo a Crecer” con el fin de ayudar a los estudiantes a evitar la violencia. El 99 % de los estudiantes que tenía en el programa no volvieron a tener ninguna pelea durante el resto del año. Posteriormente fui contratado a tiempo completo como defensor estudiantil, en el que mi rol es desarrollar la capacidad de liderazgo de los estudiantes, construir una cultura de no violencia y abordar los problemas que surjan.

Por ese entonces también me enteré sobre los Guerreros de la Paz, un programa de fomento de la paz en NLCP. Era un grupo influyente de estudiantes que habían cambiado en forma positiva la cultura en NLCP. Este grupo comenzó su acción hace diez años. Una integrante del personal, Tiffany Childress, vio que nuestra escuela estaba atravesando una transición complicada y que las peleas habían aumentado: más de 100 peleas en un solo año escolar. ¡No se puede aprender nada si tienes miedo de que ocurra una pelea! Todos estábamos preocupados por la seguridad, pero no queríamos tener una escuela con controles de seguridad u otro tipo de medidas que te hicieran sentir como si estuvieras en prisión. En su lugar, decidimos reformar la cultura de nuestra escuela. Para ello, Tiffany se capacitó en las prácticas de la no violencia del Dr. Martin Luther King Jr. y con 17 estudiantes comenzó el programa de Guerreros de la Paz para implementar tales prácticas. Esos estudiantes empezaron a revertir la oscuridad que habíamos sentido el año anterior. Actualmente tenemos un promedio de 100 Guerreros de la Paz por año.

Los Guerreros de la Paz hacen tres cosas para reforzar la cultura de paz en NLCP:

  1. 1. Interrumpir los conflictos: Los Guerreros de la Paz intervienen cada vez que surge un conflicto, ya sea en el salón de clases o en las redes sociales.
  2. 2. Interponer amor y amabilidad en todas las situaciones: Muchos estudiantes vienen a la escuela luego de haber pasado por grandes penurias o adversidades fuera de ella: desde perder a un ser querido hasta alguna otra situación en que se han sentido heridos. Cuando los Guerreros de la Paz ven que alguien está atravesando un momento difícil, le brindan inmediatamente su apoyo.
  3. 3. Actuar como embajadores de la paz: Queremos difundir nuestro mensaje de paz. Lo hacemos enseñando a los demás sobre la no violencia. Vamos a las escuelas secundarias y preparatorias vecinas. El verano pasado fuimos asignados para enseñar prácticas pacíficas a estudiantes de varias partes de la ciudad. ¡Enseñamos a 900 estudiantes el verano pasado!

 

El trabajo de los Guerreros de la Paz ha sido reconocido en todo el país. Ha sido realmente increíble. En la última década hemos inculcado a los estudiantes a ser personas compasivas y solidarias dentro de los muros de nuestra escuela. Hace dos años los estudiantes hablaron acerca de extender el programa a estudiantes de otras escuelas. Luego, en forma trágica, ocurrió el tiroteo en la escuela preparatoria de Parkland. La mayor parte de sus vidas nuestros estudiantes han tenido que afrontar en forma periódica la violencia con armas de fuego. Pero el tiroteo de Parkland trajo el problema de la violencia con armas de fuego a primer plano en todo el país. Arne Duncan escuchó sobre los Guerreros de la Paz y nos ofreció viajar a Florida para reunirnos con los estudiantes de la escuela preparatoria de Parkland. Llegamos a la casa de uno de los estudiantes con un profundo sentido de empatía. Sabíamos el dolor que ellos estaban sintiendo. Fue mágica la empatía que los estudiantes de Parkland también sintieron por los estudiantes de nuestra escuela, que experimentan regularmente la violencia con armas de fuego. Los estudiantes de Parkland ofrecieron compartir su plataforma nacional con nosotros. Algunos Guerreros de la Paz fueron a Washington D. C. y hablaron en los eventos de la Marcha por Nuestras Vidas. Llegaron medios de comunicación de todo el mundo (de Londres, Alemania, Japón) para ver la increíble campaña y acción de nuestros estudiantes. Esperamos sinceramente que nuestro trabajo impacte en los demás.